jueves, 30 de agosto de 2012








Da gusto tener un día como este compartiendo
risas y cambiando de aires, y a la vez dándote cuenta
de que se esta acabando la gente cuerda pero poco a 
poco vas eligiendo mejor tus compañías, cambiando
lo que te pincha por lo que te anima.

sábado, 25 de agosto de 2012

Puede que las malas hierbas nunca mueran, pero se consumen.




     Mañana esta tan cerca que nos pisa los talones, parece que estamos tristes, 
pero realmente no es así, tenemos los dos pies sobre la tierra y seguirá de esta
forma, manteniendo el equilibrio aunque algunos se empeñen en que levantes
un pie del suelo para autoconvencerse de que tú puedes perderlo y ellos no.
Quiero dar pasos firmes hacía algo que realmente puede crecer, seguir caminando
hacía allí mientras tú embrujo se desvanece y tú te quedas como una vieja calle
de Madrid fea, sucia, soltera y gris.

viernes, 3 de agosto de 2012

       Se despereza de tanto en tanto, recorre el album de fotos,
de vez en cuando da un trago y sigue mirando, en su cara se delatan
los signos de tortura, llora tirado sobre la manta y gime como un delirio,
siente patadas en el centro del corazón, esos simples trozos de papel
le desafiaban, se adelantaban hacía sus entrañas. Necesitaba salir a la
calle, fue al espejo de la entrada y decidió quedarse en casa,
su fachada daba escalofríos y la gente desviaría los ojos de él por
pura compasión. Volvió hacía la habitación y se quedó mirando
en la ventana, pero ya no tenía ningún interés, él, que siempre
quería verlo todo, saber todo, sentir todo, que se negaba a morir
sin conocer el conjunto que le rodeaba hasta por dentro, de eso
ya no quedaba nada, eso desapareció cuando estaba tan borracho
que sangraba whiskey y lloraba vino, la noche se le echó encima
como si se lo fuera a tragar, su cerebro desconectó se quedó junto
a lo fugaz, junto a lo que ya no existe cuando se piensa, junto a lo
que si se nombra se destruye, junto con sus estribos de aire amargo
para escarcharle la vida, la ciudad descansaba ensombrecida, los
cines nunca más volverían a proyectar sueños, proyectarán
su camino de pasos coronados de polvo, mientras el se queda
dormido con el poema más cruel de la habitación.